En Ricitos de Oro nos encanta poder ayudar a todas las madres y padres a que el momento del baño sea un momento de diversión con vuestros hij@s, un instante rutinario pero de completo disfrute y conexión, que contribuya a mejorar el vínculo con el bebé.
Sin embargo, en algunas ocasiones, este instante de placer con nuestro pequeño puede verse afectado por multitud de factores. «La hora del baño es uno de los mayores retos diarios a los que se enfrentan las madres y los padres. ¿Cuántas veces hemos escuchado esa frase de «mamá, hoy no toca baño», «papá, hoy solo cuerpo?», explica Diana Jiménez, psicóloga especializada en Infancia Positiva y Disciplina.
Por este motivo, hemos realizado con la experta un taller orientado a conocer cómo mejorar el vínculo con el bebé a través del juego en la hora del baño, en la que nos ha detallado algunos consejos para que ese momento realmente se convierta en un instante de verdadero disfrute, de felicidad y conexión con vuestros hijos. «A los niños hay que ganárselos, no ganarles. Es un trabajo difícil y que no nos han preparado para ello, porque nadie nos ha enseñado a educar sin la fuerza. Hay que hacerlo a través de la palabra, con el compromiso, la cercanía, la conexión», explica la psicóloga.
En este sentido, Diana comenta que una buena técnica es que asocien a un elemento externo – que no sea papá ni mamá para evitar eso de: ¡mamá es una mandona! – como puede ser el osito Ro, al momento del baño. «Así ya saben que cuando toca baño, ¡no es porque lo dice mamá, sino porque lo dice el osito Ro!» Además, tal y como apunta la experta, es positivo que ellos puedan elegir y sentirse partícipes de su momento del baño: que escojan con qué gel-champú 2en1 de las gamas de Ricitos de Oro quieren utilizar para ducharse. «Cuando establecemos rutinas, como la hora del baño, los niños aprenden con estructura y por asociación. Si tu hij@ asocia que la hora del baño es con su osito, es con su champú, es con su tapón sonajero dosificador y es un momento con mamá, con papá o con quién le vaya a bañar, lo va a querer».
Y es que con los productos de Ricitos de Oro no pararás de escuchar a tus peques diciéndote: «¡quiero el champú que suena!» A ellos les encanta por el tapón sonajero dosificador y su sonido, a tu su envase te facilita su aplicación. «No hay que desenroscarlo, con un simple gesto hacia arriba y con una sola mano, lo abres», subraya Jiménez. Y es que nuestros gel-champú 2en1 contribuyen a que no tengas que soltar a tu bebé en ningún momento – si es muy pequeño – y que así puedas sostenerlo todo el tiempo cuando tengas que bañarlo.
¡Os animamos a que disfrutéis del baño con los productos de Ricitos de Oro, que contribuyen a mejorar el vínculo con tu bebé a través de la diversión en el momento del baño!